viernes, 4 de mayo de 2012


¿INTERVENCIÓN HUMANITARIA O ESTRATEGIA GEOPOLÍTICA?

El 17 de febrero de 2012 se cumplía el primer aniversario del inicio de las revueltas en Libia que, tras ocho meses de enfrentamientos cruzados, acabaron con el derrocamiento del general Muammar Gadaffi. Atrás quedaron las cuatro décadas de represión del que ahora es denominado ‘sátrapa’ o ‘dictador’ pero que durante muchos años, incluso durante los meses antes de su final, era el ‘amigo de Occidente’. Grosso modo, los acontecimientos se sucedieron con una celeridad que da que pensar si extrapolamos esa visión a la Siria actual.

Nueve días después del inicio de las protestas, el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas aprobaba la Resolución 19701 por la cual se imponía un embargo de armas así como una congelación de los activos financieros y recursos económicos de la familia Gadaffi. Y un mes después, la Resolución 19732, que amparaba el uso de la fuerza en Libia en un contexto que entendía de amenaza para la paz y la seguridad internacional y en aras de proteger a los civiles libios. Asimismo, establecía una zona de exclusión aérea y prohibía explícitamente la invasión terrestre. Al mando, la OTAN que, liderada principalmente por Francia, Reino Unido y Estados Unidos, ponía en marcha la operación Odisea del Amanecer. Pero también, en apenas solo un mes se formó el Grupo de Contacto para Libia encargado de legitimar la acción del Consejo Nacional de Transición (CNT)3. El final es conocido por todos: el 20 de octubre de 2011 Gadaffi fue capturado y el 31 de ese mismo mes, Anders Fogh Rasmussen, secretario general de la OTAN, anunciaba el final de la operación:

When the United Nations took the historic decision to protect you, NATO answered the call. We launched our operation faster than ever before. More than 8,000 servicemen and women took part in our mission for Libya. We were effective, flexible and precise.4

La incertidumbre marcaba así el inicio de esta nueva etapa para Libia que ya ha fijado elecciones para el próximo mes de junio cuando se elegirá a la nueva Asamblea Constituyente. Y es que, los enfrentamientos entre tribus continúan, tal ese así que hace unos días saltaba la noticia5 de que la ciudad Beni Walid estaba en manos de gadafistas. También, Amnistía Internacional6 ha denunciado las detenciones arbitrarias contra africanos subsaharianos y ciudadanos libios de raza negra por su posible colaboración con Gadaffi. Respecto al número de refugiados es difícil encontrar cifras certeras. La Organización Internacional para las Migraciones7 afirmaba que en noviembre más de 700.000 libios estaban dejando el país, datos elevados si se tiene en cuenta que el Estado africano apenas cuenta con seis millones de habitantes.

Partiendo de esa realidad, en las siguientes líneas nos vamos a detener, aunque de manera muy breve, en analizar el papel que han jugado algunos actores internacionales en Libia para intentar desmontar nuestro interrogante: ¿Intervención humanitaria o estrategia geopolítica?
La Carta de Naciones Unidas en su Capítulo VI Arreglo Pacífico de Controversias, artículo 33, sostiene que ante una situación de amenaza para la paz y la seguridad internacional las partes “tratarán de buscarle solución ante todo mediante la negociación, la investigación, la mediación, la conciliación, el arbitraje (...)”8. En Libia, en parte por las propias circunstancias, ninguna de las acciones mencionadas se han llevado a cabo, es decir, se ha intentado proteger a los civiles libios, que ya venían padeciendo esta situación desde hace décadas, pero para ello se ha aprovechado lacoyuntura social del momento aunque también, la política y económica. Y es que, según el portal Michelcollon.info9, Gadaffi había anunciado que quería elevar la participación del Estado sobre el control del petróleo de un 30% a un 51%. No hay que menospreciar la posición de Libia como país de la Región MENA (Middle East and North Africa). Y es que, según datos del BCE10, esta región posee el 40% de la producción mundial del ‘oro negro’ y tiene las dos terceras partes de las reservas mundiales.

Respecto a EEUU el interés por el país magrebí también es manifiesto. En 2003, en el contexto de la Guerra Global contra el Terrorismo, la Administración Bush presionó a Naciones Unidas11 para que levantase el embargo a Libia (1992-2003) ya que era percibido como ‘aliado’. Cuatro años más tarde, como se observa en el siguiente video, el ex general estadounidense Wesley Clark12 explica que la Administración Bush planeó invadir siete países en cinco años, y uno de ellos era Libia.

Por su parte, la Administración Obama también ha jugado un papel decisivo. En agosto de 2011, el jefe de las Operaciones Navales, el Almirante Gary Roughead afirmaba que “I knew we were going into Libya, it was not in the public domain”13. Quizás, esta intervención se vio como una ventana de oportunidad para que el AFRICOM, el comando estratégico de EEUU para África, pudiese establecerse definitivamente en este continente, ya que desde 2008 mantiene su sede en Alemania ante el rechazo de los Estados africanos.
También es crucial la estrategia de Francia. Nicolas Sarkozy se enfrenta en abril a unas elecciones y su legitimación social cada vez está más mermada. En un intento por liderar la política exterior de Europa, frente a la hegemonía económica de Merkel en la UE, ha tomado el mando de la OTAN y fue el primer país en reconocer al CNT como refleja un informe del Instituto Elcano.14 Desde el punto de vista geopolítico, la publicación gala Libération puso el acento en el transfondo económico del apoyo al CNT por el que Francia podría controlar el 35% del petróleo del país.

España por su parte, en términos cuantitativos es el octavo proveedor de Libia, según el informe de 2011 elaborado por la Oficina Económica y Comercial de España en Trípoli15. Prueba de la importancia de los interese nacionales, es que la primera visita oficial del ex presidente José Luís Rodríguez Zapatero al país magrebí se produjo en junio de 201016. O Italia, que recientemente ha sido condenada por el Tribunal de Estrasburgo17 por el Caso Hirsi de 2009, cuando devolvió a Libia 200 inmigrantes interceptados en aguas internacionales violando los artículos 3, 4 y 13 del Convenio Europeo para la protección de los Derechos Humanos18. Este último caso hunde sus raíces en el Tratado de Amistad, Colaboración y Cooperación entre Italia y Libia del año 2007 que, paradójicamente, en su Capítulo 1, artículo 4 reconoce que:

1. Las Partes se abstendrán de cualquier forma directa o indirecta de injerencia en los asuntos internos o externos que entran en la jurisdicción de la Parte, de acuerdo con el espíritu de buena vecindad.2. De acuerdo con los principios de la legalidad internacional, Italia no utilizará ni permitirá el uso de sus territorios en ningún acto hostil contra Libia y Libia no va a utilizar, ni permitir el uso de sus territorios en ningún acto hostil contra Italia19.

Frente a la “efectividad”20 de la operación reconocida por el secretario general de la OTAN, otros, como el director ejecutivo de UN WATCH, Hillel Neuer sostienen que ésta no es la Primavera Árabe que esperaban.

We were happy to see the Gaddafi regime finally suspended last year, but this is not the Arab Spring we hoped for. Today's homophobic outburst by the new Libyan government, together with its routine abuse of prisoners and other ongoing violations, underscores the serious questions many have about the new regime's commitment to improving on the dark record of its predecessor21.

El objetivo de la comunidad internacional era en principio la protección de los ciudadanos libios y para ello había que derrocar a Gadaffi, objetivo finalmente conseguido. Sin embargo, el problema no ha acabado aquí porque la seguridad ciudadana, la violación de los derechos humanos o la precariedad de las infraestructuras siguen siendo problemas acuciantes en Libia aunque en nuestros días hayan quedado en el ostracismo y no ocupen la cabecera de los principales diarios generalistas. Se necesita un mayor esfuerzo de la comunidad internacional sin que ello suponga imponer unos intereses económicos o geopolíticos, sin que ello, valga la redundancia, signifique un nuevo Irak o un nuevo Afganistán. Los ciudadanos libios tienen una cita el próximo junio y es ahí donde la comunidad internacional jugará un papel trascendental porque deberá exigir la máxima transparencia de los comicios, que no intromisión. 
  
  



  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  
  

miércoles, 12 de enero de 2011

SUDÁN DEL SUR, LA NUEVA ‘NOVIA’ DE EEUU Y CHINA


Durante esta semana, Sudán del Sur (católico) está celebrando su referéndum de secesión de la parte norte (musulmana), que se esperaba desde los Acuerdos de Paz de 2005. Pues bien, todavía no han salido los resultados definitivos, probablemente en febrero los conoceremos, y ya hay una disputa entre dos grandes potencias, EEUU y China, por hacerse con el control de su más preciado tesoro, el petróleo.  Y es que, las tierras de Sudán del Sur albergan el 75% de las reservas de este carburante.

Pero además, hay otro problema añadido porque aunque el petróleo está en la parte sur, los oleoductos necesarios para su exportación se encuentran en la parte norte. Y he aquí, otro de los obstáculos representado en la figura del presidente de Sudán, Omar al-Bashir, acusado de genocidio y crímenes de guerra en la región occidental de Darfur. Al-Bashir se oponía a esta consulta, pero tras la última concesión de EEUU, (sacar a Sudán de la lista de países que cooperan con el terrorismo) ha accedido a su celebración e incluso ha afirmado públicamente que aceptaría el resultado definitivo.

Sin embargo, esta afirmación parece utópica o difícilmente creíble si tenemos en cuenta los datos ofrecidos por el fiscal jefe de la Corte Penal Internacional, Luís Moreno Ocampo, quien afirma que el actual presidente de Sudán ha desviado a cuentas privadas de bancos británicos unos 6.000 millones de euros procedentes del petróleo.

FUENTE: https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgpboAS3F9gT1PAxfXkGm1tSEDRWw4HBGfEZy-kZIk-rFo7GiUYh7BqQ-7IBp6p5bui-pQhenNMk7wYHhMjzPvaDnu_Lbq6Z9oOLDQFvTmy8FVSjanulbqvpzoy1IbabIAXnYXpqpd8G9U/s400/Sudan+divided.jpg








martes, 4 de enero de 2011

La incógnita política de Costa de Marfil

La población de Costa de Marfil, estimada en unos 20 millones de habitantes, desconoce a día de hoy quién será su nuevo presidente. La lucha de poder protagonizada por Gbagbo, que nunca ha sido elegido pero que gobierna el país africano desde hace una década, y Alassane Ouattara, el candidato electo, que obtuvo el 54% de los votos en la segunda vuelta celebrada el 28 de noviembre, mantiene en el aire la incógnita sobre unos comicios históricos en el país marfileño. 



             Laurent Gbagbo                                         Alassane Ouattara
                                                                                  


Fue el pasado 31 de octubre, justo cuando los brasileños elegían, en segunda vuelta, a la primera presidenta brasileña de su historia, cuando los marfileños acudieron en masa a las urnas, después de 11 años de crisis político-militar desencadenada por el golpe de Estado de 1999. Y es que, la celebración de estas elecciones había sido aplazada unas seis veces desde el años 2005. 


Entre los catorce candidatos, se incluían los tres principales líderes políticos del país africano: el presidente, Laurent Gbagbo, el ex jefe de Estado, Henri Konan Bédié, y el ex primer ministro, Alassane Ouattara. Sin embargo, ninguno de los aspirantes a presidente obtuvo la mitad de los votos más uno por lo que se convocó una segunda vuelta para el 28 de noviembre. 

Tal día, los aficionados al fútbol esperaban con ansia el derbi entre el Real Madrid y Barcelona, también Cataluña celebraba sus elecciones autonómicas de las que Artur Mas salió victorioso o Haití se enfrentaba a sus primeros comicios dentro del desorden y el caos que todavía impera desde el terremoto del 12 de enero. También era un día grande para Costa de Marfil, el principal productor de cacao del mundo, porque después de una década volvería a elegir democráticamente a un presidente. Esta vez, sólo dos candidatos: Gbagbo u Ouattara. 

Debido a la tensión política y a la escalada de violencia, los poderes públicos se vieron obligados a imponer el toque de queda desde el mismo día 28 hasta el 1 de diciembre, día en el que se empezarían a conocer los primeros resultados. Finalmente, y con un 54% de los votos, Ouattara fue el presidente electo. 

Estas elecciones debían poner fin a la crisis desatada por el golpe de Estado de 1999 y agravada por el golpe frustrado de 2002, que provocó una guerra y la división de esta ex colonia francesa de África Occidental. Sin embargo, el miedo a una segunda guerra civil sobrevuela en el ambiente. Y es que, después de un mes, Gabgbo aún no ha abandonado el poder. 

Las presiones de la comunidad internacional son baladí. La última intentona fracasó el lunes 3 de enero cuando los presidentes de Benin, Cabo Verde y Sierra Leona y el primer ministro de Kenia viajaron al país para ofrecerle a Gbagbo inmunidad judicial a cambio de que ceda la presidencia pacíficamente a Ouattara. Y es que, además de no ser procesado por violaciones de los Derechos Humanos, el hasta hoy presidente de Costa de Marfil también exige conservar sus cuentas en el extranjero ahora bloqueadas, al menos en EE UU y la Unión Europea, y que sus principales partidarios tengan un lugar en el nuevo Gobierno. 

Mientras, el país continúa dividido y controlado en el sur por las Fuerzas Armadas y de Seguridad leales a Gbagbo, y en el norte por las Fuerzas Nuevas de Soro, quien lideró en 2002 el Movimiento Patriótico de Costa de Marfil contra el actual presidente, origen de la Guerra Civil Marfileña, y que respaldan a Ouattara. 

De nuevo, vuelve a repetirse la radiografía de la inmensa mayoría de los países africanos: un presidente autoritario que vulnera los derechos humanos de su población y se niega abandonar el poder; una comunidad internacional con nula influencia y de la que todavía hoy desconocemos cuál es su verdadero poder y una población que vive en el olvido. 


DILMA ROUSSEFF TOMA POSESIÓN EN BRASIL

El primer post de este blog recogía la victoria de la primera presidenta brasileña de la historia. Hoy, dos meses después de aquel 31 de octubre, Rousseff ya ha tomado posesión. En su primer discurso de investidura, celebrado el pasado 1 de enero, Dilma apostó por la erradicación de la pobreza extrema en Brasil y quiso resaltar también el papel de la mujer. Lula, que se despide con una aprobación popular del 80%, seguirá a la sombra de su sucesora.





http://www.elpais.com/articulo/internacional/Dilma/Rousseff/toma/posesion/presidenta/Brasil/compromete/acabar/miseria/elpepuint/20110101elpepuint_4/Tes
http://mundonoticias.portalmundos.com/dilma-rousseff-investida-como-primera-mujer-presidenta-de-brasil/http://mundonoticias.portalmundos.com/dilma-rousseff-investida-como-primera-mujer-presidenta-de-brasil/
http://www.youtube.com/watch?v=6_eVeFLn9k4
http://www.publico.es/internacional/354218/dilma-rousseff-asume-su-cargo-como-primera-presidenta-de-brasil

lunes, 27 de diciembre de 2010

El niño que deja de ser niño para convertirse en soldado



“Cuatro años es mucho tiempo en la vida de un menor. Pueden ocurrir muchas cosas que, para bien o para mal, afectarán al resto de su vida. Puede que algunos niños y niñas vivan en situaciones de paz y seguridad. Para infinidad de ellos, la guerra sigue siendo algo muy real. Sobre este aspecto del mundo de los adultos no tienen control ni apenas pueden opinar. Cuatro años es tiempo suficiente para que se produzcan cambios sustanciales en la vida de un movimiento mundial (…)”. Con estas palabras comienza el último informe publicado por la organización Save the Children sobre los niños soldados. 


Mapa que muestra a algunos de los países que reclutan a niños soldados. Fuente: Amnistía Internacional

Nos adentramos en la última semana del año 2010. Son días éstos de ilusión para los más peques, aunque también para los adultos. Sin embargo, en algunos lugares del mundo esta alegría se transforma en terror, injusticia o miedo porque la etapa de la niñez es eliminada sin encontrar ninguna justificación moral y los niños y niñas se ven obligados a convertirse, de forma prematura, en soldados adultos. 

Este año que se despide nos ha dejado el juicio contra Charles Taylor, ex presidente de Liberia, ante el Tribunal Especial para Sierra Leona de La Haya, por los llamados diamantes sangrientos. Se trata del primer jefe de Estado africano juzgado por el uso que hizo de los preciados minerales para financiar a los vecinos rebeldes sierraleoneses y dominar así los recursos naturales del país. Sus abogados admitieron las atrocidades, pero no que él las cometiera. Y es que, las cifras son aterradoras. La guerra de Sierra Leona (1991-2001) costó entre 50.000 y 75.000 vidas y convirtió a unos dos millones en refugiados, de una población de seis millones. En Liberia, se calculan más de 100.000 muertos. 

La película ‘Diamante de Sangre’, protagonizada por Leonardo DiCaprio, nos ofrece una radiografía de cómo las guerrillas secuestran a los niños y los entrenan militarmente. Drogas, sangre o armas pasan a convertirse en los nuevos juguetes de unos niños que luchan entre ellos para ver quien mata mejor o quien puede llegar a ser el líder. 

También 2010 nos dejó la celebración en EEUU del primer juicio, después de la II Guerra Mundial, contra un menor acusado de matar a un soldado norteamericano en Afganistán. Omar Khadr, el preso más joven de la cárcel de Guantánamo, que por cierto continúa abierta y han pasado dos años desde que Obama afirmara que se cerraría, fue detenido con 15 años en un campamento de Al Qaeda en Afganistán. 

"La Comunidad Internacional sin excepción ha rechazado juzgar a niños por crímenes de guerra. Todos los fiscales del mundo han usado su discrecionalidad para asegurar su rehabilitación, en lugar de perseguirlos por crímenes que cometieron cuando eran niños soldados reclutados por adultos para luchar en causas que ni siquiera entendían", afirmó en el mes de septiembre la representante especial del secretario general de las Naciones Unidas (ONU) para Niños y Conflictos Armados, Radhika Coomaraswamy, quien rechazó abiertamente este juicio. Y es que, Naciones Unidas solicitó a Estados Unidos que anulase el juicio por su dudosa legalidad y advirtió que éste suponía un peligroso precedente para los niños soldados de todo el mundo. 

Según los distintos organismos internacionales, más de 300.000 niños están siendo explotados como soldados por guerrillas y ejércitos y entre ellos, hay más de 120.000 niñas que sufren todo tipo de abusos sexuales y que a menudo son "olvidadas" en los procesos de desarme Desmovilización y Reintegración. Según también el último informe de Save The Childen, más de tres cuartas partes de los Estados ya han firmado o ratificado el Protocolo Facultativo de la Convención sobre los Derechos del Niño, relativo a la participación de menores en los conflictos armados, o se han adherido a él. 

Sin embargo, existe una doble moral. Por ejemplo, España suscribe estos tratados que reconocen los derechos del niño pero, al mismo tiempo sigue vendiendo armas a los países sin imponer ningún límite. Por tanto, nuestro país, al igual que otros muchos, sería cómplice de estas prácticas ilegales. La venta de armas supone un beneficio económico importante para las arcas de los Estados. Así, en el año 2009, uno de los peores para la economía de nuestro país, las exportaciones de defensa alcanzaron un récord histórico, más de 1.300 millones de euros, lo que supuso un incremento del 44% con respecto al año 2008. He aquí un pastel muy goloso para dejarlo escapar. 

Y un último dato que es interesante resaltar. Cuando pensamos en niños soldados automáticamente se nos vienen a la cabeza los países africanos, asiáticos o latinoamericanos. Sin embargo, las potencias occidentales también recurren a los niños para mantener las guerras. Así, entre 2003 y 2005, Reino Unido  desplegó a unos 15 menores de edad en Irak a pesar de haber firmado en junio de 2003 el Protocolo de la Convención de los Derechos del Niño, que prohibe esta práctica. Hace tan sólo tres años, el Gobierno británico reconoció que había destacado a menores de 18 años en "áreas en las que podrían estar expuestos a hostilidades" desde la firma del Protocolo. No sólo Reino Unido, también EEUU, Alemania o Austria incurren en estas prácticas.  








martes, 23 de noviembre de 2010

Dependencia e independencia, ¿las reglas de la globalización?

Me resistía a hablar de Haití. Quería esperar hasta el próximo domingo o, tal vez al lunes, porque entonces sabría que, por fin, unas elecciones habían tenido lugar en el país latinoamericano. ¡Por fin una buena noticia! Pero, entonces me topo con la cruda realidad y supongo que será esto lo que me ha hecho cambiar de opinión.

 Recientemente he terminado de leer un libro sobre Salvador Allende en el que se recogen algunos de los discursos pronunciados por el malogrado presidente de Chile. En concreto, uno de ellos, pronunciado en México en 1972, me ha hecho reflexionar sobre sus palabras puesto que al extrapolarlas a nuestros días siguen teniendo vigencia o, incluso cobran aún más fuerza. No sé si puede decirse entonces que era un ‘visionario’ tal y como hace tan sólo unos días fue denominado el ex presidente Aznar por su homólogo estadounidense G. Bush. Me gustaría pensar que no, puesto que si ser visionario supone entrar en una guerra bajo el pretexto de la existencia de armas de destrucción masiva, que curiosamente nunca hemos visto,  supongo que entonces a nadie le gustaría que le llamasen visionario. Pero, la verdad es que no era este el tema en cuestión.

En el citado discurso, Allende afirmaba que a mayor pobreza, mayor enfermedad y que a mayor enfermedad, mayor pobreza refiriéndose a la imposibilidad que tenían (y siguen teniendo) miles de personas en Latinoamérica para acceder al sistema sanitario y que son muy pocos los que luchan para que las instituciones estatales lleven la salud ampliamente al pueblo.  Además, añadía lo siguiente: “Llevamos, casi todos nuestros pueblos, más de un siglo y medio de independencia política, ¿cuáles son los datos que marcan nuestra dependencia y nuestra explotación? Siendo países potencialmente ricos, la mayoría somos pueblos pobres”.  ¿Y por qué sucede esto?, se pregunta unas líneas más adelante. “Porque somos países monoproductores en la inmensa mayoría: somos los países del cacao, del banano, del café, del petróleo o del cobre. Somos países productores de materias primas e importadores de artículos manufacturados; vendemos barato y compramos caro”. Esto es, probablemente, lo que entendemos como la gran diferencia entre norte-sur o centro-periferia, mientras los primeros se benefician, los segundos salen perjudicados.

Esa puede ser la imagen de Haití, el país más pobre de América Latina. Más de 1.300 muertes por cólera, unas 50.000 personas contagiadas o cadáveres hacinados y que si no son tratados adecuadamente pueden transmitir la enfermedad hasta 15 días después de su fallecimiento. Pero, también puede ser la radiografía del Congo donde, según un informe de 2009 del Programa de la ONU para el desarrollo de esta zona, la mayoría de sus habitantes viven con menos de un euro al día, cantidad impensable para nosotros. Lo más frustrante es que la República Democrática del Congo es un país rico en minerales, especialmente estaño, tantalio, tungsteno y oro. Sin embargo, históricamente no han sido fuente de desarrollo para su población, sino de violencia, explotación y sangrientos conflictos internos. Esta realidad persiste en la inmensa mayoría de los países del continente africano, con Zinbabwe, el país más pobre del mundo, a la cabeza de esta injusta lista,  donde unos treinta millones de niños menores de cinco años sufren desnutrición  y el 43% de la población no tiene agua potable. Además, África registra el 70% de los casos de SIDA  del mundo, con más de 2,2 millones de muertes al año.

También Pakistán se encuentra en esa misma situación, sobre todo, tras las lluvias de agosto que dejaron a la intemperie a más de 13 millones de personas. Hace un par de días se celebró el Día Mundial contra la Neumonía y expertos en salud consideraron que se trataba de una oportunidad para instar al país a que tomara conciencia y frenase esta enfermedad que mata a cientos de miles de sus ciudadanos cada año, en su mayoría niños y ancianos. Según datos oficiales, de las 15 naciones con el 75%  de los casos de neumonía infantil, Pakistán se ubica en tercer lugar, con siete millones de muertes al año. Tan sólo hemos citado cuatro países pero, hay muchos más que padecen situaciones similares o incluso peores a las que hemos señalado.

Fuente: Fao
Curiosamente, el primero de los ocho objetivos del Proyecto Milenio es erradicar la pobreza extrema y el hambre. Las metas propuestas para ello son la reducción a la mitad, entre 1990 y 2015, tanto del porcentaje de personas cuyos ingresos sean inferiores a un euro por día como del porcentaje de personas que padezcan hambre. Un reto complicado a tenor de la escasa implicación de los países industrializados.  

Aquí, en España, también hay muchas personas que viven en el olvido.  Desde el lunes pasado y hasta el próximo sábado se está celebrando la ‘Semana de los Sin Techo’ y, es que, cada vez son más las personas que se ven obligadas a refugiarse en la calle por diversas circunstancias de la vida. Supongo que esta celebración es un reconocimiento, pero para ellos no será más que otra semana de noviembre en la que deberán buscar cobijo para pasar las duras noches de frío. 

Independencia y dependencia; centro-periferia; norte-sur... estas son inevitablemente las reglas del juego de la llamada globalización. No sé si caminamos hacia un mundo mejor, lo que sí creo es que otro mundo es posible. Espero que a principios de la semana que viene, justo el lunes cuando la gran noticia del día sea el 'gran derbi', no entre dos equipos de fútbol sino, entre dos máquinas de hacer dinero como lo son Real Madrid y Barcelona, o el resultado de los comicios de Cataluña, Haití o Costa de Marfil puedan tener un hueco en este entramado mediático y, espero también que esa presencia sea por algo positivo de las elecciones que se celebrarán en ambos países. 

Fuentes:
-    Salvador Allende, Presente.

jueves, 11 de noviembre de 2010

LOS INVISIBLES









Cada año, decenas de miles de personas dejan atrás sus hogares en Centroamérica y atraviesan México como migrantes irregulares. Viajan con la esperanza de llegar a Estados Unidos y de ver cumplida allí la promesa de trabajo y de una nueva vida. Pero con demasiada frecuencia sus sueños se convierten en pesadillas al afrontar uno de los viajes más peligrosos del mundo. El actor y productor mexicano, Gael García Bernal en colaboración con Amnistía Internacional, ha grabado un viaje lleno de abusos, secuestros, violaciones e incluso asesinatos a través de cuatro cortos, llamados Los Invisibles.


En este enlace http://www.es.amnesty.org/losinvisibles/ se pueden ver los otros tres cortos grabados por el actor Gael García Bernal.


Debemos dejar de ser invisibles. Así es como acaba el último de los cortos. Sin embargo, ¿es fácil ser visto en el mundo actual? Creo que no a tenor de todas las legislaciones que se están aprobando en contra de la migración. Un ejemplo, EEUU. El pasado mes de junio entró en vigor la Ley de Arizona SB1070 o ley 'Apoye nuestras fuerzas de orden público y los vecindarios seguros' que permite a la policía detener a cualquier persona si hay "sospecha razonable" de que es inmigrante ilegal, aunque es importante señalar que una persona nunca puede ser ilegal, el problema es que su uso se ha generalizado en los medios de comunicación y en la política fomentando aún más la criminalización y discriminación del migrante. Por supuesto, no nos podemos olvidar del movimiento Tea Party que en las últimas semanas, antes de las elecciones de noviembre, se jactaba de anunciar que "la única salida para los negros era la venta de drogas o el atletismo". Expresiones simplistas, sin fundamento y discriminatorias que han tenido sin embargo una escasa o nula repercusión en el mundo occidental. 
Pero, la verdad es que no tenemos que cruzar el charco para ser testigos de este tipo de medidas. En Italia, Il Cavaliere, Silvio Berlusconi,  propuso la política del 'chivo expiatorio' o Nicolás Sarkozy en Francia que continúa con la 'repatriación', según el gobierno, de los gitanos rumanos. Y es que, si una cosa nos ha quedado clara durante estos últimos meses es que estas expulsiones sólo eran de gitanos y de Rumanía. ¡Qué triste! Y a esto le llamamos información o periodismo serio. 
Y como no, España, ¿qué pasa en Melilla? ¿cuántas personas mueren al año? ¿Cuál es la situación en los Centros de Internamiento para Extranjeros? ¿sale a luz pública que estas personas no pueden ser privadas de libertad y encarceladas como si hubieran cometido algún delito? ¿el delito es ser extranjero? Parece que sí. Sólo hay que ver la imagen que se nos proyecta de ellos: son personas que vienen a 'quitarnos' el trabajo. El problema es que nadie se acuerda de que España también fue un país migrante. 
¿Es posible dejar de ser invisible? Sigo pensando que no porque vivimos en una sociedad materialista, donde el concepto de empatía poca veces sale a relucir, desigual donde la relación centro (mundo occidental)-periferia (resto de países) cada vez está más presente. Se apela continuamente a la globalización pero sólo en términos económicos puesto que difícilmente podemos referirnos a una globalización cultural y humanitaria. De otro lado, los discursos políticos que en materia de inmigración suelen afianzar la importancia de la multiculturalidad. Sin embargo, esto no es más que una utopía políticamente correcta. Y una última duda que me surge, ¿cómo sé que un inmigrante puede estar en situación irregular? Yo por lo menos no tengo la respuesta y más bien me recuerda a la 'caza de brujas'. 

martes, 9 de noviembre de 2010

Emilio Massera, verdugo de la dictadura argentina

                               
Emilio Eduardo Masseran junto a Jorge Rafael Videla
FUENTE: http://blogs.clarin.com/la-voz-del-algarrobo/2009/11/18/massera-inimputable/

Intervino en el golpe militar junto a Videla y dirigió uno de los mayores centros de tortura del régimen

A
noche murió en el Hospital Naval de Buenos Aires, Emilio Eduardo Massera, uno de los personajes más siniestros de la dictadura argentina (entre 1976 y 1983) condenado a cadena perpetua por crímenes contra la humanidad. En su puesto de jefe de la Armada controlaba todo lo que sucedía en el interior de la Escuela Mecánica de la Armada (ESMA), un edificio situado sobre una de las principales avenidas de la capital argentina que se convirtió en uno de los mayores centros de detención ilegal, tortura, robo de bebés y asesinatos del régimen militar. Se calcula que sólo por sus instalaciones pasaron unos 5.000 secuestrados de los cuales apenas unas decenas sobrevivieron.


Desde 2005 Emilio Massera había sido declarado incapaz por su estado de salud de graves deficiencias neuronales sumadas a demencia senil. A pesar de ello estaba siendo juzgado en ausencia por la desaparición de tres ciudadanos italianos.

Nacido en 1925 en la localidad de Paraná y tras una notable carrera en la Armada en la que contó la ayuda de Juan Domingo Perón, Massera protagonizó junto a los generales Jorge Rafael Videla y Orlando Agostí, el golpe de Estado que el 24 de marzo de 1976 depuso a María Estela Martínez, viuda del presidente argentino.
La Junta Militar desató la persecución sistemática de opositores mediante detenciones ilegales y desaparición de los secuestrados.
A veces se incluía además el robo de las posesiones de los represaliados, incluyendo sus viviendas. Massera, apodado El Cero y El Negro fue encontrado culpable de todos estos delitos por el tribunal que lo juzgó en 1985. Había abandonado la Junta y pasado a la reserva en 1978, sin embargo, quiso seguir al frente del Grupo de Tareas de la ESMA, es decir, de los militares encargados de custodiar, interrogar y torturar a los detenidos en el edificio, así como de elegir a aquellos que debían embarcar narcotizados en aviones Hércules para ser arrojados de noche sobre las aguas del Río de la Plata. Y es que Massera no mostró tanto apego a las labores de Gobierno como a las de torturas.
Tras la condena, el ex militar —se le había prohibido volver a vestir el azul marino de la Armada— debía pasar el resto de sus días en prisión. Sin embargo en 1990 el presidente peronista Carlos Saúl Menem le indultó tanto a él como a otros jefes de la dictadura entra las protestas de familiares de las víctimas y organismos defensores de los derechos humanos.
Pero los indultos de Menem no podían abarcar dos aspectos de crímenes contra la humanidad que resultaron imprescriptibles. Por un lado el robo de bebés que les eran arrancados a las secuestradas en el mismo paritorio para ser entregados a familias afines a la dictadura, y por otro el Plan Cóndor; la colaboración coordinada entre todas las dictaduras del cono Sur para perseguir, y en ocasiones hacer desaparecer, a cualquier ciudadano de una dictadura amiga que fuera considerado una amenaza.
Massera se vio de nuevo procesado, pero su deterioro físico y mental —en 2002 sufrió un derrame cerebral que lo dejó postrado— le sirvió para ser declarado incompetente por la Justicia Argentina. Seguramente no llegara a ser consciente de que en 2005 la Corte Supremo anulaba las Leyes de Obediencia Debida y Punto Final que había servido para que centenares de personas que participaron en la represión quedaran impunes. Ni que en junio de 2009 su indulto fue declarado inconstitucional y que por tanto volvía a ser, a todos los efectos, un condenado.
http://www.elpais.com/articulo/internacional/Emilio/Massera/verdugo/dictadura/argentina/elpepuint/20101108elpepuint_11/Tes




FUENTE: http://www.youtube.com/watch?v=6U4lsonqwk8

Cerca de 30.000 personas fueron torturadas, represaliadas o secuestradas tras el golpe de estado de 1976 en Argentina. Por esa misma fecha, nuestro país empezaba a ver la luz al final del túnel y estaba ansioso por consolidar una democracia, tras sufrir más de treinta años de dictadura franquista. Quizás, la diferencia entre ambas es el modo en el que se ha tratado a los 'autores' de estas dictaduras. En España es cierto que existe la Ley de la Memoria Histórica. Sin embargo, la nota común de ésta son los innumerables obstáculos que se presentan a la hora de abrir e investigar las fosas. El Gobierno transfirió las competencias a las autonomías y dependiendo del partido que esté en el poder el proyecto sigue adelante o no. Tampoco se puede olvidar el proceso contra el juez Garzón. Dejando de lado que muchos podamos pensar que en ocasiones ha buscado el protagonismo, es de los pocos magistrados que ha luchado por recuperar la memoria de los represaliados durante el franquismo. Curiosamente, será Argentina quien reconozca su labor en un homenaje que la presidenta Cristina Kirchner le prepara en la Plaza de Mayo.Y es que, a diferencia de España, el país latinoamericano si trabaja en la recuperación de la memoria histórica y en juzgar a los responsables de la dictadura como hemos leído en la noticia. Un ejemplo de esta lucha son las Abuelas de la Plaza de Mayo que trabaja en la búsqueda de todos los bebés que fueron secuestrados durante la dictadura. A veinte años, Luz, un libro que se puede consultar en la web de las Abuelas de la Plaza de mayo, relata la historia de uno de estos bebés secuestrados que tras tener un hijo siente la necesidad de buscar su identidad. Y es que, aunque muchos digan que las heridas ya se cerraron,  éstas siempre permanecen abiertas hasta que uno no conoce definitivamente la verdad.